El senador Fidel Espinoza ha salido a desmentir la información que circulaba sobre la supuesta inadmisibilidad de la querella que presentó contra el diputado Daniel Manouchehri. Aclaró que la acción judicial sigue su curso y, además, anunció que solicitará el desafuero del parlamentario a raíz de nuevos y graves antecedentes.
Querella fue declarada Admisible en Noviembre
Contrario a lo que se había difundido, el senador Espinoza, junto a su representante legal, confirmó que la querella fue declarada admisible por el tribunal el pasado 24 de noviembre. Según explicó, las resoluciones judiciales posteriores no significan un rechazo de la acción, sino que corresponden a una etapa procesal previa a la solicitud de desafuero. De esta manera, el proceso legal contra el diputado Manouchehri continúa avanzando conforme a derecho.
Nuevos antecedentes motivan solicitud de desafuero
La decisión de Espinoza de insistir en el proceso y solicitar el desafuero se ha visto reforzada por un reciente episodio. El parlamentario denunció que ocurrieron nuevos hechos en la Comisión de Deporte del Congreso Nacional, los cuales serán incorporados a la querella.
«Este señor agredió verbalmente al abogado que me representa, Enrique Aldunate, a quien no le permitía el derecho solicitado por los miembros de la comisión de Deporte a exponer en un tema de alta sensibilidad pública», detalló Espinoza.
El camino hacia el desafuero
El equipo legal del senador se prepara para presentar formalmente la solicitud de desafuero contra el diputado Manouchehri. Espinoza argumenta que existen pruebas suficientes que demuestran un patrón de conducta agresiva por parte del diputado, afectando no solo a sus adversarios políticos, sino también a sus propios pares en el parlamento.
«Solicitaremos el desafuero del señor Manouchehri, porque creemos que tenemos suficientes antecedentes que dan muestra de que sus actitudes no son aisladas», afirmó el senador, añadiendo que «el nivel de agresividad con el cual desempeña sus funciones son una constante para todo aquel que dista de sus opiniones, y eso, obviamente, atenta contra nuestra democracia interna en el parlamento».