La fuga de más de 20 mil salmones desde una jaula en Calbuco ha encendido las alarmas en la Región de Los Lagos, desatando una investigación por presunto delito y riesgo sanitario. Este incidente, que afecta a la empresa Marine Farm, ha puesto en el ojo de la tormenta la seguridad de la acuicultura en la zona y las implicaciones para la salud pública.
Alerta Sanitaria y Presunto Acto Delictual en Calbuco
El escape masivo ocurrió en el centro de cultivo Marine Farm, ubicado en San Antonio de Calbuco, donde una fisura de aproximadamente 15 metros en una de las jaulas permitió la salida de los ejemplares al mar. La situación se agrava con la declaración del alcalde de Calbuco, Marcos Silva, quien ha indicado que este hecho podría no ser accidental, sino el resultado de un acto delictual. 🕵️♂️ Esta sospecha se refuerza al considerar el reciente robo de elementos de buceo en la misma área, sugiriendo la posible participación de redes organizadas dedicadas a la extracción ilegal de salmones.
La preocupación más apremiante, según el alcalde Silva, radica en el riesgo sanitario que estos salmones representan. Los ejemplares escapados habían sido tratados recientemente con antibióticos y antiparasitarios, lo que los hace no aptos para el consumo humano. 🚫 Silva también ha expresado su inquietud por la lentitud de las respuestas institucionales, señalando que, transcurridas más de 48 horas, aún no hay pronunciamientos oficiales claros de la autoridad sanitaria ni de Sernapesca sobre el impacto en la población por el consumo de estas especies.
Acciones de Contención y Precedentes
Ante la magnitud del incidente, la Armada de Chile ha desplegado un operativo para contener la situación. En colaboración con pescadores locales, la empresa Marine Farm ha logrado recapturar cerca de dos mil ejemplares en la zona afectada. Este esfuerzo conjunto busca limitar tanto el impacto ambiental como el sanitario.
Este evento no es un caso aislado en la región. La fuga de salmones ha sido un problema recurrente, con antecedentes de incidentes similares que han involucrado a otras empresas como Mowi, sancionadas por la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) por escapes masivos. Estos episodios subrayan la vulnerabilidad del ecosistema marino y los desafíos que enfrenta la industria acuícola en la Región de Los Lagos.
Fiscalización y Normativa Vigente
Sernapesca está llevando a cabo fiscalizaciones en terreno en conjunto con la SMA para determinar las causas y consecuencias del escape. Además, supervisan el cumplimiento del plan de contingencia y la adecuada disposición de los ejemplares recapturados. Es crucial destacar que, según la normativa actual, los salmones que pierden su trazabilidad tras un escape no pueden ser destinados al consumo humano. 🐟❌ En su lugar, deben ser procesados en plantas reductoras para evitar cualquier riesgo sanitario.
La investigación en curso en Calbuco es un recordatorio de la importancia de reforzar los controles y la seguridad en la industria salmonera. La comunidad espera respuestas claras y acciones contundentes para proteger tanto el medio ambiente como la salud de los consumidores.